La red social estrella de Google está presentando una baja considerable en su tráfico, en alrededor de un 60%, en comparación a lo que fue su pico de éxito la semana del 20 de septiembre, donde fue liberado a todo el mundo (recordemos que previo a esa fecha sólo se podía acceder a la red social a través de una invitación).
Su récord fueron 25 millones de visitas durante las primeras 4 semanas de su puesta en marcha masiva, y a partir de esa fecha nunca más volvió a registrar esos índices de visitas. Si bien, ya hay 45 millones de usuarios registrados menos de la mitad tiene actividad en la plataforma social. Esto demuestra que pese a la publicidad invertida por Google este esfuerzo no está dando resultados ya que los usuarios, al parecer, no han visto razones para quedarse.
Entonces, las pregunta que aparecen son ¿los usuarios no tienen tiempo para tener dos redes sociales prácticamente iguales?, ¿prefieren quedarse con la que más conocen y esperar las actualizaciones y mejoras de esa red?
Durante los últimos meses, Facebook, dominador del mercado global, puso en alerta a sus equipos y logró desarrollar algunos conceptos innovadores que ofrece Google+, tales como los hangout (Facebook lo hizo a través de un convenio con Skype) y los círculos de relaciones.
Otra incógnita que aparece en el horizonte está basada en estadísticas de usuarios de Facebook y que podría realmente afectar la performance de Google+: ¿Podría sobrevivir una red social sin juegos sociales? ¿Luego de escapar de la excesiva sociabilidad de Facebook, los actuales usuarios de Google+ soportarían una avalancha de invitaciones a juegos sin chistar?
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